Macrooperación de Hacienda contra una treintena de establecimientos por las ventas en negro
La Agencia Tributaria (AEAT) acaba de cerrar una macroperación contra una treintena de establecimientos que utilizaban programas informáticos para ocultar ventas. Estas compañías, que se dedicaban al textil y el calzado, podrían haber mantenido el B hasta el 30% de su facturación.
El operativo, que se desarrolló ayer de manera simultánea en nueve comunidades autónomas (Andalucía, Aragón, Baleares, Cantabria, Castilla y León, Cataluña, La Rioja, Madrid y Comunidad Valenciana) en el marco de la operación ‘Scarpe’, ha supuesto el registro de los sistemas informáticos existentes en 29 establecimientos pertenecientes a 11 sociedades.
«El ‘software’ utilizado, denominado ‘de doble uso’, permitía modificar las cifras reales de facturación para hacer constar contablemente un menor número de ventas y con un importe inferior», asegura Hacienda.
El fraude se concentraba en las ventas en efectivo, lo que causaba que las operaciones con tarjeta llegasen a representar hasta el 95% de toda la facturación declarada.
Las cifras del fraude son llamativas: la facturación anual declarada se situaba entre el millón y los 10 millones de euros, mientras que las ventas ocultadas podrían ser de hasta un 30% de su facturación real.
«Los importes declarados a la Agencia Tributaria resultaban sensiblemente inferiores a los que se corresponderían con la facturación real de estas sociedades, hasta el punto de que algunas de ellas llegaban a declarar pérdidas en algunos ejercicios, o márgenes de beneficios muy reducidos», explica Hacienda en un comunicado.
En esta operación, denominada ‘Scarpe’, ha contado con la intervención de la Unidad de Auditoría Informática de la ONIF y de nueve dependencias de Inspección, con la participación de 107 funcionarios.
A esto se suma que la AEAT ultima un plan global para atacar las ventas en negro en todos los canales por los que discurren. Para ello, se inspeccionarán las cajas registradoras, se desarrollará una trazabilidad de los productos, se entrará en los ordenadores de las empresas y se acortarán los plazos y se incrementarán las exigencias de las declaraciones ahora trimestrales de IVA de las pymes. El plan se dirige a todas las empresas pero se centrará muy especialmente en las pymes. Ya se está aplicando y será plenamente desarrollado por una Orden Ministerial en las próximas fechas, según han trasladado fuentes conocedoras del proyecto.
El nuevo proyecto se divide en una pata de control de cajas, ordenadores y productos, y en una segunda parte de gestión, por la que podrían convertirse las declaraciones trimestrales del IVA de las pymes en mensuales, como las del resto de empresas, y exigir muchas más obligaciones formales, en línea con el modelo 340, por el que se debe detallar cada factura. Además, estos nuevos requisitos tendrán incidencias en otros impuestos como en el de Sociedades.
Santiago Menéndez, director de la AEAT, ha subrayado que la Agencia está incrementando su apuesta por utilizar las nuevas tecnologías en la lucha contra el fraude fiscal. Hasta ahora, el Plan de Control Tributario de 2014 ha marcado como objetivo prioritario la inspección de los ordenadores de las empresas para cercar la doble contabilidad. Pero el nuevo plan va más lejos. Menéndez ha anunciado que la AEAT realizará un seguimiento informático de la información de los movimientos de cajas registradoras, puntos de venta y mercancías, así como de los medios de pago en dichas operaciones. Se trata de configurar un sistema que impida que haya ventas en B.
Menéndez ha explicado que se valdrán de técnicas de auditoría informática «adentrándose en los ordenadores y en la información que dispongan las empresas y los operadores», para garantizar un «seguimiento en la trazabilidad de los movimientos». Los objetos de control serán mercancías, apuntes en los registros contables, terminales de puntos de venta y de medios de pago, cajas registradoras, apuntes de los programas informáticos que recojan esas operaciones y, en la medida de lo posible, medios de pago utilizados para el pago de todas las operaciones.
«Creo que este enfoque de la lucha contra el fraude es fundamental de cara a conseguir un éxito rotundo en la misma», ha defendido Menéndez, en un momento en el que la recaudación de la lucha contra el fraude ha caído en 2013 un 9%. Además, a su juicio, «si las administraciones tributarias no somos capaces de entender que tenemos que ser intensivos en la utilización de las nuevas tecnologías para conseguir erradicar en lo posible la lucha contra el fraude, habremos errado el pronóstico y erraremos probablemente en el éxito».
FUENTE: DIARIO EXPANSION /Mercedes Serraller